El despido sin preaviso es una de las situaciones que más incertidumbre genera en el ámbito laboral en España. A menudo, surgen dudas sobre si una empresa realmente puede despedir de un día para otro, sin previo aviso ni el plazo habitual de 15 días que se aplica en ciertos tipos de extinción contractual.
En términos generales, la ley permite este tipo de despido en circunstancias muy específicas, especialmente cuando se alega una falta disciplinaria grave. No obstante, en algunos casos, las empresas aplican un despido sin preaviso de manera incorrecta, ya sea por desconocimiento o por una mala gestión del proceso, lo que puede derivar en sanciones legales o en la calificación del despido como improcedente.
En este artículo, responderemos a cuestiones clave como si te pueden despedir sin avisar, cuándo te tienen que dar la carta de despido, con cuántos días de antelación deben avisarte de un despido y qué ocurre si un trabajador decide marcharse sin cumplir el preaviso de 15 días. También analizaremos el despido improcedente sin preaviso y las opciones de reclamación disponibles para el trabajador si considera que la empresa no ha actuado conforme a la normativa.
¿Qué es un despido sin preaviso y cuándo se aplica?
El término despido sin preaviso hace referencia a la terminación de la relación laboral por iniciativa de la empresa sin otorgar un margen de tiempo previo. A diferencia de ciertos despidos (por ejemplo, el despido objetivo) que exigen un plazo de 15 días, el despido inmediato puede efectuarse si las circunstancias lo justifican.
Generalmente, esta modalidad está estrechamente ligada a un despido disciplinario, que se basa en conductas graves del trabajador (indisciplina, faltas repetidas de asistencia o puntualidad injustificadas, ofensas verbales o físicas, acoso, etc.). En estos casos, se pueden despedir de un día para otro siempre que la empresa pueda demostrar la gravedad de los hechos.
No obstante, los requisitos de forma no desaparecen. La empresa debe indicar los motivos y la fecha de efectos mediante la carta de despido, explicando por qué se aplica el despido inmediato. Si estas formalidades no se cumplen, el despido podría considerarse improcedente.
Despido disciplinario: la principal causa de despido sin previo aviso
En España, el despido sin preaviso se aplica con mayor frecuencia en casos de despido disciplinario, regulado en el Estatuto de los Trabajadores cuando un empleado comete faltas muy graves. Algunos ejemplos de estas conductas son:
- Faltas reiteradas de asistencia o puntualidad sin justificación.
- Desobediencia o indisciplina manifiesta.
- Ofensas físicas o verbales a compañeros o superiores.
- Transgresión de la buena fe contractual, como apropiación indebida de bienes de la empresa.
- Incurrir en acoso laboral o violencia en el entorno de trabajo.
Cuando la empresa alega motivos disciplinarios justificados, puede despedir sin aviso previo. Sin embargo, es imprescindible la entrega de la carta de despido con los detalles de la conducta imputada y la fecha de finalización del contrato. De lo contrario, el afectado podría impugnar el despido y lograr que se declare como despido improcedente sin preaviso, con la consecuente obligación de indemnizar o readmitir al trabajador.
¿Cuándo se debe entregar la carta de despido y con cuántos días de antelación?
La validez de cualquier despido depende de su correcta comunicación. La ley exige una carta escrita que detalle las causas y la fecha de efectos del cese. Aun cuando se trate de un despido sin preaviso, el trabajador debe recibir la carta de forma inmediata o tan pronto como la empresa haya decidido finalizar la relación laboral.
En el despido disciplinario, no se exige un plazo de antelación. La notificación puede ser de un día para otro.
En el despido objetivo, se establece un preaviso de 15 días, salvo que el convenio colectivo aplicable disponga otra cosa.
El problema surge cuando la empresa no entrega la carta de despido o no especifica con claridad los motivos y la fecha de efectos. Esta falta de forma puede derivar en la calificación de despido improcedente si el asunto llega a juicio.
Despido sin preaviso de 15 días: ¿es legal?
Un despido sin el preaviso de 15 días suele generar mucha confusión entre los trabajadores. Hay que tener en cuenta que este plazo de 15 días está asociado principalmente a los despidos objetivos, que se justifican por causas económicas, organizativas o productivas, así como a ciertas finalizaciones contractuales concretas. Sin embargo, en el despido disciplinario no existe la obligación de preavisar, de modo que hablar de un despido sin preaviso de 15 días no tiene sentido cuando se trata de una causa disciplinaria.
Por otro lado, si la empresa realiza un despido que sí requiere preaviso (por ejemplo, un despido objetivo) pero no respeta ese plazo, puede compensar al trabajador mediante el abono económico de esos 15 días que no se han otorgado. La clave, por tanto, radica en determinar correctamente la causa del despido y el procedimiento que la ley exige para cada caso.
Despido sin preaviso en contrato indefinido: ¿qué debes saber?
Tener un contrato fijo no significa que no pueda producirse un despido sin preaviso con un contrato indefinido. Si se demuestra una falta grave, el empresario puede finalizar la relación laboral de forma inmediata, sin necesidad de otorgar un aviso previo. No obstante, es obligatorio que la empresa entregue una carta de despido en la que se indiquen los motivos y la fecha de efectos.
Este tipo de despido solo es válido si se ajusta a los que dice la ley. Si la empresa no justifica correctamente la causa o no cumple con los requisitos de comunicación, el trabajador puede impugnarlo y conseguir que sea declarado despido improcedente. En ese caso, la empresa estaría obligada a indemnizar según lo establecido por la ley o, en algunos supuestos, a readmitir al trabajador.
En la práctica, muchas empresas optan por reconocer la improcedencia del despido desde el principio y abonar la indemnización correspondiente para evitar un litigio. Sin embargo, si el trabajador considera que los motivos alegados no son válidos o que la indemnización es insuficiente, es recomendable que busque asesoramiento legal y presente una reclamación formal.
Consecuencias de irse sin dar los 15 días en España
Al finalizar una relación laboral, muchos trabajadores en España se cuestionan qué pasa si se van del trabajo sin dar los 15 días. Las principales consecuencias de no respetar este preaviso son las siguientes:
- Deducción en el finiquito: La empresa puede descontar de la liquidación los días de preaviso no cumplidos.
- Reducción de la liquidación: Si existen importes pendientes, como vacaciones no disfrutadas o incentivos, podrían verse afectados por penalizaciones adicionales según lo estipulado en el convenio colectivo.
- Posibles conflictos futuros: Aunque no es lo más habitual, la empresa podría reclamar una indemnización por daños y perjuicios si demuestra que la falta de preaviso le ha ocasionado un perjuicio económico real y cuantificable.

Despido improcedente sin preaviso: ¿cómo reclamar?
El despido improcedente sin preaviso se produce cuando un juzgado estima que la empresa no ha podido justificar suficientemente la causa alegada para un despido disciplinario o incumplió requisitos esenciales de forma. De este modo, no solo deja de ser un despido válido, sino que el empresario debe afrontar la indemnización o la readmisión del trabajador.
Para reclamar, el afectado dispone de 20 días hábiles desde la fecha de efectos del despido. El primer paso es la conciliación ante el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC). Si no se llega a un acuerdo, el siguiente escalón es la vía judicial en el Juzgado de lo Social.
Me han echado del trabajo sin avisar, ¿qué opciones tengo?
Si la empresa decide finalizar el contrato de forma repentina, es decir, si te han echado del trabajo sin avisar, es fundamental mantener la calma y actuar con rapidez siguiendo estos pasos:
- Solicitar o conservar la carta de despido: Debe especificar la fecha de efectos y la causa del despido.
- Consultar con un profesional (abogado laboralista o graduado social): Un especialista analizará si el despido cumple con los requisitos legales y si puede considerarse improcedente.
- Iniciar el proceso de conciliación: La ley establece un procedimiento previo obligatorio para intentar llegar a un acuerdo antes de acudir a juicio.
- Recurrir al juzgado: Si no se alcanza un acuerdo en la conciliación, un juez determinará la validez del despido y las posibles compensaciones para el trabajador.
Carta de despido: requisitos y plazos legales
Todo despido, sea disciplinario, objetivo o de otro tipo, exige la entrega de la carta de despido. Este documento, más allá de ser una formalidad, garantiza la transparencia en el proceso y da al trabajador la oportunidad de conocer las razones concretas que aduce la empresa. Si no se entrega la carta o esta no se ajusta a los requisitos básicos (mención de los hechos concretos, fecha de efectos y legislación aplicable), el despido puede convertirse en improcedente.
¿Qué hacer si no te entregan la carta de despido?
Aunque la ley exige que el empleador entregue la carta de despido, en algunas ocasiones la empresa se niega a proporcionarla. Ante esta situación, es recomendable:
- Solicitarla por escrito: Dejar constancia de tu petición.
- Reunir pruebas: Emails, testigos o cualquier documento que refleje la comunicación del despido.
- No firmar documentos sin comprenderlos: Si la empresa te entrega algo ambiguo, es preferible indicar no conforme junto a la firma.
- Acudir a un profesional: La falta de información formal puede ser un argumento sólido para declarar un despido improcedente.
Preguntas frecuentes sobre el despido sin preaviso
A continuación, resolvemos algunas de las dudas más recurrentes en torno a este tema.
¿Te pueden despedir sin avisar en España?
La respuesta es un sí. Cuando el despido está motivado por una falta grave (por ejemplo, despido disciplinario), la ley no exige preaviso. Aun así, la empresa debe presentar una carta formal.
¿Qué pasa si me han despedido de un día para otro?
Primero, verifica si la empresa te entregó la carta de despido y revisa sus motivos. Si consideras que no existen causas justificadas, puedes impugnar en 20 días hábiles.
¿Con cuántos días te tienen que avisar de un despido en contrato indefinido?
En un contrato indefinido, si es un despido disciplinario, puede ser inmediato. En cambio, el despido objetivo requiere normalmente 15 días de preaviso. Todo depende de la causa real.
¿Qué sucede si me despiden sin preaviso en un contrato temporal de 3 meses?
Si tienes un contrato de 3 meses te pueden despedir antes si existe una causa objetiva o disciplinaria. Sin embargo, el empleador debe justificarlo formalmente.
¿Qué pasa si me voy del trabajo sin dar los 15 días en España?
Si no cumples ese plazo, la empresa puede descontar del finiquito los días de preaviso incumplidos y, en casos extremos, reclamar daños y perjuicios.
Conclusiones y consejos para empleadores y trabajadores
El despido sin preaviso es una medida legal que se aplica, principalmente, en casos de infracciones graves dentro de la relación laboral. Aunque no se exige un período de aviso previo, la empresa está obligada a justificar adecuadamente la decisión y a entregar una carta de despido que cumpla con los requisitos legales. Si no se cumplen estas formalidades, el despido podría ser considerado improcedente, lo que obligaría a la empresa a indemnizar al trabajador o, en algunos casos, a readmitirlo.
Para los empleados, es fundamental actuar con rapidez ante un despido inesperado. El plazo para impugnar la decisión ante los tribunales laborales es de 20 días hábiles, por lo que se recomienda acudir primero al Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC) antes de emprender acciones legales. Por otro lado, las empresas deben asegurarse de que las causas del despido sean justificadas y estén correctamente documentadas para evitar conflictos legales.
En el caso contrario, si es el trabajador quien decide renunciar sin cumplir el preaviso, debe asumir las posibles consecuencias económicas y laborales. En España, la empresa tiene derecho a descontar del finiquito los días de preaviso no cumplidos, tal y como establecen la legislación y los convenios colectivos aplicables.
Tanto empleadores como trabajadores deben garantizar el cumplimiento de la normativa vigente en materia de despidos y renuncias. Ante cualquier duda, contar con asesoramiento laboral especializado es clave para evitar errores que puedan derivar en sanciones o reclamaciones legales.